Artículo publicado por Daniel Domene en el número 8 de la revista Tribuna Popular hablando sobre el significado del nombre de la operación que ayer martes llegó hasta Villena:
Tal y como ha sucedido en otros países, y como marca el protocolo de actuación ante pandemias, el Estado Mayor de la Defensa (EMAD) puso en marcha el pasado mes la Operación Balmis en el territorio español. Esta operación ha movilizado a más de 2.500 efectivos de la Unidad Militar de Emergencias (UME), los tres ejércitos y la propia Guardia Real, con el objetivo de hacer frente al Coronavirus. Entre las tareas principales se encuentran las que todos conocemos por la prensa, la desinfección de las infraestructuras críticas y el apoyo a los servicios de seguridad. Además, desde el inicio de la Operación, el Centro Militar de Farmacia de la Defensa produce gel desinfectante, paracetamol y antivirales.
Algo que quizá no sea tan conocido es el por qué de ese nombre “Balmis”, el cuál tiene detrás una historia de verdaderos héroes, y con carácter Alicantino. Francisco Javier Balmis fue un médico militar, de la corte de Carlos IV. Por aquella época, a principios del siglo XIX, una grave pandemia de viruela azotaba a todos los núcleos poblacionales del mundo. En España, incluso acabó con la vida de un hermano del Rey, y con una de sus hijas, de tan solo 3 años. Por aquel entonces, unas 200.000 personas morían cada año debido a este virus.
Un médico inglés observó que las ordeñadoras de vacas se contagiaban de una especie de viruela vacuna, muchísimo menos letal que la viruela humana. Este hecho, le llevo a aislar el suero de la sangre de las vacas y con ello pudo fabricar una vacuna para la viruela, conocimiento que poco tardó en difundirse por toda Europa.
Una vez conocida la vacuna, y su procedimiento de fabricación y protocolos médicos, Francisco J. Balmis convenció al monarca para llevar a cabo una expedición a los territorios de ultramar, con el objetivo de vacunar a todas las personas que se encontraban fuera de la península y que estaban bajo el control de la corona española. En un tiempo récord, la expedición, que se llamaría entonces “Real Expedición Filantrópica de la Vacuna”, comandada por el propio Balmis, partió desde La Coruña, con destino a las Islas Canarias, Venezuela, Colombia, Ecuador, Perú, Nueva España, Filipinas e, incluso, consiguió permiso para llegar a China.
En la época, como se puede usted imaginar, no existían maneras seguras para transportar el suero durante tantos días a través del océano. Por este motivo fue necesario el reclutamiento de una veintena de niños huérfanos, a los que se les inocularía el virus de la viruela y así poder transportar la vacuna. Sólo ellos sabrán las penurias que tuvieron que pasar, pero con su esfuerzo, se consiguieron salvar millones de vidas.
Balmis volvió a España tras 7 largos años de expedición, habiendo formado a médicos de todo el mundo para que continuaran con la labor de vacunación en todos los territorios dónde la expedición llegó. Por este motivo, se considera a ésta la primera expedición sanitaria internacional de la historia, siendo homenajeada en esta ocasión por el ejército, que con el mismo espíritu que Balmis, batalla contra el COVID-19.
Imagen: https://okdiario.com/look/casa-real/rey-felipe-operacion-balmis-coronavirus-931494